Año: 1986, Fallos: 308:2226 de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Argentina

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procedente la acción incoada "sin remover del mundo jurídico la resolución administrativa, como se dijo, goza de presunción de legitimidad". - Señala por último el a quo que la pretensión "de que es falso que no se solicite la modificación de la Resolución 311 (en la parte pertinente) en la demanda instaurada", dado lo que se dice en el punto 30 cuat., resulta inadmisible, pues la petición de nulidad del acto debe ser expresa, clara y categórica. .

Contra ese pronunciamiento, los actores interpusieron recurso extraordinario (fs. 140/149), cuya denegatoria (Es. -159/160) origina esta presentación directa.

Es cierto que los actos administrativos gozan de presunción de legitimidad mientras no hayan sido descalificados por nulidad declarada legalmente y que, en el sub lite, el recurrente no denuncia formalmente el vicio que acarrearía esa sanción. .

No obstante, resulta claro que la demanda, pese la omisión formal apuntada, está dirigida a la reconstrucción de la ecuación económico- financiera, lo que importa, entre otras cosas la desca- lificación de los actos que impiden ese objeto, entre ellos la resolución 311/81. °
A ello cabe agregar que en la primera oportunidad que tuvo N
el apelante, dio los argumentos, a' mi entender válidos, para controvertir adecuadamente la cuestión relativa a la presunción de legitimidad del acto. Tal ocurre en el escrito de fs. 123/128 (espe- cialmente puntos 26 en adelante).

- Así las cosas, pienso que en la pretensión de la actora debé incluirse por natural extensión, la descalificación del acto cuya .

vigencia obsta a la procedencia de la acción, y, por tanto, me parece un rigorismo formal excesivo la manifestación de los jueces en orden a que no cabe atender el reclamo de la actora fundado en la violación de la garantía de propiedad, por no haberse:impugnado concretamente de nulidad la resolución N° 311/81.

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