Año: 1983, Fallos: 305:1065 de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Argentina

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Esta apreciación sobre las características de la acción de los imputados no solo se desprende de las declaraciones de los damnificados o de los informes médicos que describen las lesiones que presentan, sino de los dichos de los mismos policías que se acusan mutuamente de agresiones en perjuicio de los detenidos. Así el oficial José Ramón Méndez ratifica a fs. 471 vta. lo declarado por el Intendente de Federación, respecto a que vio castigar a los presos e increpó por ello al Jefe Departamental, Gramajo, y más adelante agrega, ante una pregunta sobre si vio golpear a los detenidos, "que sí, que vio que los golpeaban con golpes de puño y puntapiés, especialmente el cabo primero Sotelo que castigaba con una linterna". El oficial Jorge Enrique Furlanetto, a fs. 475 in fine, dice que "observó que en la Jefatura de Federación había una persona de civil, que luego se enteró que era de apellido Sotelo, que castigaba con una linterna a los detenidos e incluso al deponente le llamó la atención, dado que insistía a una persona enferma, al parecer de ciática, a pararse derecha. El agente de la policía de Concordia, Clemente Montenegro, a fs. 489 dice que "vio a Sotelo golpeando a los detenidos, aunque no puede precisar con qué objeto, recuerda haberlo visto con una linterna". Por su parte el cabo primero Sotelo, dice a fs. 294 vta., que vio a muchas personas detenidas y observó que personal policial de Concordia, "les aplicaban golpes de puño, y con la carabina itaka les pegaban por el cuerpo, a la altura de las costillas, los hacían correr y luego les daban puntapiés, y los obligaban a hacer salto de rana".

Agrega que tanto el oficial Méndez como el otro oficial sub-ayudante Furlanctto) los instigaban a los agentes a que golpeen a los detenidos, expresando, además, que vio a un señor Gómez que tenía un golpe de puño en la nariz, y otro hombre, cuyo nombre ignora, estaba tan golpeado que no podía moverse y debieron internarlo en el hospital. El agente Carlos María Compri, a fs. 291 vta., dice que vio al personal policial de Concordia, tanto cuando realizaron el operativo en el bar cercano al obrador de la nueva ciudad de Federación, como en la Jefatura de Policía, que "les dieron malos tratos a los detenidos golpeándolos con los balistones, aplicándoles golpes de puño y gol peándolos también con la culata de la itaka y pistola lanza-gases".

Además "los hacían correr cuerpo a tierra, los obligaban a correr y luego les hacían zancadillas". A otra pregunta dice que luego de esos

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